Trastornos de la motilidad gástrica en perros
Urgencia: Puede esperar
Pronóstico: Bueno

Los trastornos de motilidad gástrica se deben al mal funcionamiento de los músculos del estómago, ocasionando problemas de digestión y dificultad en el trasporte de los alimentos. Los movimientos excesivos que ocurren con demasiada frecuencia causan dolor mientras que, la motilidad lenta por debajo de los movimientos normales provoca un vaciado gástrico retrasado, retención gástrica anormal e hinchazón. 

Los trastornos de motilidad gástrica son más comunes en perros viejos que en perros jóvenes. 

Síntomas

Vómito crónico de alimentos, especialmente al poco tiempo de comer, pérdida de peso, pérdida de apetito, náuseas, eructos e ingesta de sustancias no comestibles.

Los síntomas clínicos varían dependiendo de la causa principal responsable del trastorno.

Causas

Las causas son múltiples y pueden deberse a trastornos metabólicos como: hipocalemia, uremia, encefalopatía hepática o hipotiroidismo. Asimismo, los trastornos en la motilidad también pueden ser efectos secundarios de enfermedades gástricas como la gastritis, ulceras gástricas, cirugías gástricas o tras el uso de algunos medicamentos. 

En algunos casos es de origen desconocido.

Diagnóstico

El veterinario realizará un perfil sanguíneo químico, un conteo sanguíneo completo y un análisis de orina para buscar las posibles causas de la motilidad gástrica disminuida o aumentada. El perfil electrolítico permitirá determinar el desequilibrio acido-base y el desequilibrio electrolítico.

Por otro lado, las radiografías abdominales con sulfato de bario facilitarán visualizar el movimiento del estómago y localizar el exceso de gases, líquidos o alimentos en el estómago. 

El ultrasonido al igual que la endoscopia, son herramientas útiles para el diagnóstico en la evaluación de los movimientos gástricos. La endoscopia se emplea con frecuencia para examinar la estructura interna de los órganos del estómago, masas, tumores, células anormales, entre otros y también puede usarse para obtener tejidos para una biopsia. 

Tratamiento

En la mayoría de los casos, el perro no necesita de cuidados hospitalarios más que una terapia de fluidos para restablecer el déficit de líquidos y los desequilibrios electrolíticos en casos de pérdida severa de líquidos corporales por vómitos o diarreas. 

El cuidado ambulatorio incluirá dietas liquidas o semilíquidas administradas con frecuencia en pequeñas cantidades. Por lo general, una dieta bien suministrada es suficiente para la resolución exitosa del problema. Sin embargo, en algunos perros se puede emplear medicamentos para aumentar la motilidad gástrica. 

Si el perro no responde al tratamiento, podría requerir cirugía y el can podrá recuperar sus funciones gástricas normales al cabo de 10 a 14 días.