Enrojecimiento doloroso con hinchazón corneal difusa, especialmente si el glaucoma también está presente. Temblores del iris y sombras anormales en el ojo.
El cristalino es una lente convexa que se ubica en el centro del ojo justo por detrás de la pupila. Está sujeto al ojo por las fibras zonulares y cuando se produce la luxación es porque se han roto total o parcialmente (luxación o subluxación respectivamente). Esto provoca que el cristalino pierda la ubicación natural y se desplace.
El cristalino o lente puede perder su ubicación natural y:
La luxación sucede con más frecuencia en perros adultos, con edades comprendidas entre los cuatro y los nueve años y, las razas predispuestas genéticamente a la dislocación del lente ocular son los terriers tibetanos, los collies fronterizos, los pastores alemanes y algunos spaniels.
Enrojecimiento doloroso con hinchazón corneal difusa, especialmente si el glaucoma también está presente. Temblores del iris y sombras anormales en el ojo.
Las causas más habituales son la edad y la debilidad congénita de las fibras zonulares que sujetan el cristalino. Sin embargo, también puede estar ocasionado por otros problemas oculares como un tumor ocular, un glaucoma, traumas o lesiones, uveítis severa o uveítis crónica.
El veterinario realizará un examen físico y oftalmológico exhaustivo, tomando en cuenta el historial médico del perro. Es probable que tu veterinario use un diagnóstico diferencial que consiste en una inspección profunda de los síntomas externos aparentes, descartando cada una de las causas comunes hasta dar con el diagnóstico acertado.
Entre las afecciones que pueden ocasionar inflamación de los ojos y ser concurrentes con la luxación del cristalino tenemos la uveítis, el glaucoma, la epiescleroqueratitis granulomatosa nodular y la distrofia endotelial de la córnea.
La luxación anterior del cristalino es más grave y requiere de una intervención quirúrgica para retirar el cristalino desplazado. Sin embargo, con la luxación posterior del cristalino por lo general el veterinario tratará de reducir los efectos que produce esta condición pero el cristalino se quedará desplazado. Normalmente se aplicará una terapia tópica miótica y tratará de conseguir la constricción de la pupila del ojo.
En el caso que la luxación del cristalino sea una condición adquirida a causa de otra enfermedad, lo primero que hará el veterinario es tratar de solucionar la enfermedad subyacente.
Si la luxación de cristalino no se tratara a tiempo, el perro podría perder la vista. Los perros ciegos pueden tratarse mediante la evisceración o por la enucleación con prótesis intraesclerales es decir, reemplazo del ojo con un ojo artificial. Si la afección es secundaria al cáncer, la enucleación es la mejor opción.
Tras recibir el tratamiento inicial, el perro debe ser reexaminado a las 24 horas y posteriormente, cada tres meses. Desafortunadamente, existe la posibilidad de que la luxación de la lente afecte a ambos ojos si aún no lo ha hecho.