Fiebre, convulsiones y cambios de comportamiento. Parálisis de la cara, disminución de la capacidad de respuesta, inclinación de la cabeza hacia cualquier lado y movimientos descoordinados.
Tamaño desigual de las pupilas y pupilas de tamaño más pequeño.
Aunque los síntomas pueden variar según la parte del cerebro afectada, generalmente aparecen de repente y progresan rápidamente.