Cáncer en las glándulas anales de los gatos
Urgencia: Puede esperar
Pronóstico: Malo

Enfermedad invasiva donde se evidencia un crecimiento rectal en el animal. Como se trata de un tumor maligno también es común encontrar la enfermedad en los ganglios linfáticos. 

Debido al tipo de enfermedad, se puede diseminar rápidamente a otras áreas del cuerpo del animal.  Existen opciones de tratamiento disponibles, normalmente quirúrgicas, que pueden ayudar a mejorar las posibilidades de supervivencia del animal.

Síntomas

El signo más común de cáncer de glándulas anales es una masa o tumor rectal. Los tumores suelen ser de naturaleza pequeña. Además de los signos visibles de un tumor, los gatos que padecen la enfermedad pueden estar estreñidos o tener dificultad para defecar (obstipación), tener pérdida de apetito (anorexia), estar excesivamente sedientos (polidipsia) y pueden parecer letárgicos.

Causas

Actualmente no hay ninguna raza que sea la más propensa a este tipo de cáncer. La enfermedad a menudo se asocia con un desequilibrio hormonal, ya que a menudo se encuentra en el área anal. También está relacionado con la hipercalcemia en el cuerpo del animal.

Diagnóstico

Se inserta una aguja fina en la masa anal cancerosa (aspirado) y se examinan las células para descartar cualquier otra condición posible. En algunos casos, se necesita una incisión y una biopsia completa para diagnosticar correctamente la masa. 

Algunos veterinarios también usarán imágenes para observar el tamaño de la masa (radiografías o ultrasonidos).

Tratamiento

La extirpación del tumor y los ganglios linfáticos infectados pueden prolongar la vida de un animal. La radiación también se usa para ayudar con los tumores localmente recurrentes.

Después de extirpar el tumor, se recomienda continuar con el monitoreo del animal a través de exámenes físicos, radiografías, ultrasonidos y análisis de sangre. Las pruebas de calcio y riñón también funcionan para monitorear la enfermedad y su posible recurrencia.