En la mayoría de casos el único tratamiento es una cirugía parpebral. Su veterinario le recetará antibióticos y antiinflamatorios postquirúrgicos.
Una de las técnicas quirúrgicas más frecuentes en el entropión es la técnica de Hotz-Celsus modificado, que consiste en extirpar una tira de piel y músculo del párpado, suturándolo posteriormente.
En el ectropión puede ser suficiente con la irrigación diaria del ojo con suero salino estéril y el uso periódico de pomadas lubricantes.
Es muy importante que los criadores de gatos pongan especial atención a esta enfermedad y eviten tener descendencia de gatos con estas anormalidades.