• Caídas constantes
• Tropiezos
• Falta de coordinación
• Postura anormal de la cabeza
• Vómitos
• Nauseas
• Movimientos oculares erráticos sin capacidad para enfocar
• Dar vueltas en círculos

Los mareos y la desorrientación puede estar causada por enfermedades hereditarias.

Si no es de orígen hereditario, puede tener las causas las podemos agrupar en:

• Problemas del oído. Otitis o infecciones de oído
• Problemas que afectan al sistema nervioso central. Enfermedades como la toxoplasmosis, el moquillo, la meningoencefalitis, los tumores, las lesiones cerebrales o hasta medicamentos puede afectar al correcto funcionamiento del sistema nervioso central.

Primero el veterinario preguntará por los síntomas detectados. Es una enfermedad difícil de diagnosticar. El veterinario deberá ir descartando otras opciones con síntomas parecidos.

Para solucionar los problemas de equilibrio habrá que solucionar las causas. Si fuera una otitis, se recetarán antibióticos. Si fueran problemas con el sistema nervioso central también habrá que tratarlos.

Si no se detectara ninguna causa, lo único que podremos hacer es esperar porque muchas veces desparecen los problemas tal y como aparecieron. 

En ocasiones las pérdidas de equilibrio provocan mareos y vómitos y entonces habría que alimentar e hidratar al gato con sonda.

En 72 horas los gatos ya habrán experimentado una gran mejora.  Si no fuera así, podría ser otra cosa.