Los perros con exoftalmos presentan fiebre, malestar general, párpado hinchado, "ojo de cereza", pérdida de visión, bolsas de pus en el ojo o alrededor de él, secreción de los ojos que es acuosa o mucosa mezclada con pus, incapacidad para cerrar los párpados por completo, inflamación de la córnea o tejido circundante y dolor al abrir la boca.
Los enoftalmos se caracterizan porque el borde del párpado se pliega o invierte en dirección hacia la superficie del ojo, atrofia de los músculos que rodean el ojo y el “Ojo de cereza”.
Y el estrabismo es la desviación de uno o ambos ojos de la posición normal, disminución del funcionamiento de los músculos que rodean el ojo y dificultad para enfocar.