- Sangrado espontáneo
- Hemorragias nasales (epistaxis)
- El sangrado suele provenir de las superficies mucosas (nariz, boca, encías, etc.)
- El sangrado prolongado en algunos animales durante los procedimientos de diagnóstico o quirúrgico
Los trastornos de plaquetas son un problema importante. Podemos encontrar una cantidad o una calidad anormal de plaquetas en la sangre.
En algunos casos el funcionamiento de las plaquetas es anormal (trombocitopatía). El principal problema es que las plaquetas no se adhieran unas a otras, lo que es muy importante a la hora de cerrar heridas. La consecuencia es que un pequeño accidente o corte puede producir un sangrado excesivo.
Y en cuanto al número de plaquetas, nos podemos encontrar con un número excesivo de plaquetas que es peligroso porque podría causar trombos o también que fuera insuficiente y hablaríamos entonces de una enfermedad llamada trombocitopenia. Son alteraciones graves y a considerar porque pueden poner en riesgo la calidad de vida del gato pero, con un tratamiento adecuado, la recuperación es posible y satisfactoria.
Se suele detectar en un análisis de sangre rutinario, pero hay que prestar especial atención si el gato presenta sangrado anormal por las membranas mucosas, es decir, la nariz, la boca, las orejas o el ano. A veces, puede aparecer en gatos muy jóvenes, en este caso, el sangrado anormal se centra en las encías y está ligado al cambio de dentición de gatito a gato adulto.
Podemos encontrar múltiples causas para tener unas plaquetas anormales:
El veterinario debe realizar un análisis físico completo que incluya perfil bioquímico, análisis y conteo de plaquetas en sangre tomando como referencia los modelos normalizados, análisis de orina y control de electrolitos en la sangre. El veterinario también preguntará por los síntomas detectados. Todas estas pruebas pueden indicar que el gato simplemente tiene problemas de anemia si el sangrado es recurrente con lo cual se tienen que tomar las medidas oportunas.
El veterinario realizará pruebas para la determinación del correcto funcionamiento de las plaquetas: tiempo de protombia, y tiempo de tromboplastina parcial activado. Así se detectarán posibles problemas de coagulopatia, es decir, la dificultad de las plaquetas para unirse entre sí, causando un sangrado excesivo. El sangrado por la nariz puede medirse con una mínima incisión en la parte interior de la mejilla. La cantidad de sangre y el tiempo que tarda en curarse la herida determinarán si existe un problema de alteración de las plaquetas.
Puede ser necesaria una transfusión de plaquetas en determinados casos muy concretos. La anemia excesiva también puede combatirse con una transfusión de sangre. No debe asustarnos esta posibilidad, se realiza como si le aplicáramos un suero y puede salvar la vida del gato.
Por su parte, las razas con trombocitopatía hereditaria o predisposición a la misma necesitarán de medicación específica que determinará el veterinario.
La hemorragia mortal es muy rara, no obstante, en periodos en los que el sangrado es abundante, aparte de llevarlo al veterinario, es bueno restringir su actividad y no ofrecerle comidas que exijan una mordida prolongada, como el pienso seco o croquetas, pues pueden producir sangrado de encías. Las comidas blandas están especialmente indicadas en estos casos.
En el caso de razas de gatos con trombocitopatía hereditaria, se debería plantear con seriedad la posibilidad de castración del animal para evitar que se reproduzca.