Síndrome del intestino irritable en gatos
Urgencia: Puede esperar
Pronóstico: Bueno

Más que una dolencia, es un malestar que sufre el gato que se concreta en dolor abdominal, diarrea o estreñimiento y vómitos.  

Se desconoce su causa pero existen algunos factores que pueden provocarla. Por ejemplo, alergias a determinados alimentos, complicaciones en el tracto gastrointestinal y posiblemente, situaciones de estrés vividas por el gato. 

Muchas veces se diagnóstica intestino irritable cuando se han descartado todas las demás causas de los problemas que sufre el gato.

Síntomas

Los síntomas más comunes de los síndromes de intestino irritable son la diarrea crónica y ocasional del intestino grueso, que incluye el paso frecuente de pequeñas cantidades de heces y moco, y el estreñimiento (disquinesia). También puede producirse dolor abdominal, hinchazón, vómitos y náuseas. Algunos gatos pueden mostrar dolor al tocar la zona abdominal. 

Causas

Detectamos varias potenciales causas:

  • Intolerancias a ciertos alimentos 
  • Estrés
  • Falta de fibra en la dieta 
  • Actividad mioeléctrica colónica y motilidad anormales 
  • Cambios en la regulación neuronal o neuroquímica de la función del colon.
Diagnóstico

Informe a su veterinario de la actividad del gato y de todos los síntomas detectados. El profesional realizará un examen físico completo. Así podrá eliminar las causas potenciales de la diarrea, tales como inflamación del colon, infección bacteriana, infección por hongos, intolerancia alimentaria, giro anormal de los intestinos y presencia de tumores cancerígenos en el colon.

Tratamiento

En estos casos, es importante mantener ciertos hábitos de prevención, como por ejemplo, mantener al gato lejos de las situaciones estresantes y procurarle una dieta fácilmente digerible y con un alto volumen de fibra para ayudarle a restaurar el funcionamiento normal del estómago y los intestinos. El veterinario determinará la mejor alimentación atendiendo a criterios como la raza, la edad y el nivel de actividad.

Como medida de control sobre la eficacia del tratamiento, deberá vigilar la consistencia de las heces de su gato y observar si hay signos de estreñimiento y malestar abdominal.