Retención de líquidos e hinchazón de tejidos en gatos: linfedema
Urgencia: Lo antes posible
Pronóstico: Reservado

La linfedema se produce por la acumulación de fluidos en el espacio alrededor de las células (espacio intersticial) principalmente en tejido subcutáneo.

La linfedema se produce por un mal funcionamiento del sistema linfático que no drena bien. El sistema linfático está compuesto por ganglios, vasos linfáticos y órganos linfoides que producen, almacenan y transportan los glóbulos blancos a las zonas donde hay infección.

La linfa es un líquido transparente y blanquecino que transporta los linfocitos y el quilo que producen los intestinos y contiene proteínas y grasas.

Síntomas

La acumulación de líquido (edema) no suele ser dolorosa y tiene fosas; es decir, se desarrolla una depresión si se empuja la piel con un dedo (que eventualmente desaparece si se produce fibrosis). 

La hinchazón puede afectar a una o varias extremidades, y suele comenzar al final de la extremidad y se desplaza lentamente hacia arriba. En algunos casos, también se puede desarrollar cojera y dolor.

Causas

Las linfedemas pueden ser primarios o secundarios. 

Los primarios sólo afectan al sistema linfático y son hereditarios. Y los secundarios aparecen como consecuencia de otras patologías como tumores, cirugías, traumatismos o enfermedades inflamatorias.

Diagnóstico

El veterinario primero realizará una exploración física en búsqueda de zonas hinchadas. En caso de linfedemas, la hinchazón normalmente se presenta en las patas traseras del gato.

Después el veterinario realizará un análisis completo de sangre y de orina para determinar el estado de salud general del gato.

Si sospechara de linfedema será importante realizar una biopsia del tejido de la zona inflamada. También es interesante realizar una linfangiografía directa que es una radiografía con líquido de contraste que permite visualizar los ganglios y vasos linfáticos. También ayuda una resonancia magnética porque permite revisar la estructura y tamaño de los ganglios linfáticos.

Tratamiento

La linfedema no se puede curar pero si se detecta rápido. el gato puede mantener una buena calidad de vida y evitar que el hinchazón sea muy grande.

El tratamiento dependerá de la cronicidad en que se presente la linfedema. Si es algo puntual, en principio no haríamos nada y esperaríamos a que bajara la hinchazón. Si la hinchazón se repitiera podríamos rebajar los inconvenientes con:

  • Un vendaje compresivo de tipo Robert Jone
  • Un vendaje rígido tipo escayola
  • Tratamiento con medicamentos. En principio puede ser útil el nicotinato de tocoferol y el hidrato sulfonato sódico. A largo plazo no es recomendable el uso de diuréticos.
  • Cirugía. El veterinario podría extirpar el tejido y reconstruir.