Hay varios signos que se pueden notar con este trastorno médico, incluyendo el lamido del área vaginal, la falta de voluntad para copular y el dolor al orinar (disuria).
La hiperplasia de tipo 1 se produce cuando hay una ligera protuberancia de la masa, aunque no salga de la propia vulva. La hiperplasia tipo 2, por otro lado, es cuando el tejido vaginal sobresale a través de la abertura de la vulva. La hiperplasia tipo 3 se refiere a la masa que se puede ver externamente.