El signo más común del «ojo de cereza» es una masa ovalada que sobresale del tercer párpado del gato. Puede ocurrir en uno o ambos ojos, y puede estar acompañado de hinchazón e irritación.
La glándula prolapsada del tercer párpado se refiere a una masa rosa que sobresale en la esquina interna del ojo conocida también como “ojo de cereza”. Es más común en perros aunque algunos gatos también pueden sufrirla. Se produce por la inflamación de la glándula lagrimal.
El signo más común del «ojo de cereza» es una masa ovalada que sobresale del tercer párpado del gato. Puede ocurrir en uno o ambos ojos, y puede estar acompañado de hinchazón e irritación.
Se asocia con una debilidad congénita de la fijación de la glándula en el ojo del gato pero no se sabe si la condición se hereda o no. También influyen factores externos como los traumatismos o las infecciones.
El veterinario examinará la masa en el tercer párpado del gato. El diagnóstico de la glándula prolapsada podría ser cartílago desplazado, células anormales o prolapso de grasa en el ojo del gato.
En casos leves, la cirugía de reubicación de la glándula en el ojo del gato es suficiente para aliviar la afección, junto la aplicación de medicamentos tópicos para reducir la inflamación. Normalmente el veterinario fijará con sutura la glándula para evitar que vuelva a desplazarse. Por el contrario, si la afección es grave, el veterinario le realizará la extirpación de toda la glándula.
El veterinario puede manejar temporalmente la afección con antiinflamatorios tópicos, antibióticos si hay infección y lubricantes oculares.