El hombro es una articulación que permite una amplio rango de movimiento en el gato. Une la cabeza del húmero con la cavidad glenoidea de la escápula del gato. La estabilidad de la articulación depende de los tendones y los ligamentos.
Síntomas
Los síntomas dependen de la gravedad y la duración de la lesión. El inicio generalmente es sutil y van aumentando los signos:
Causas
Los problemas en los ligamentos y tendones del hombro normalmente vienen por una distensión provocada por un golpe o por un sobreesfuerzo. Esta distensión provocará que el gato no pueda correr de la forma habitual.
Diagnóstico
El veterinario primero preguntará por el ejercicio realizado y por dónde ha estado el gato en las últimas horas. Tratará de averiguar si se ha podido dar algún golpe o haber hecho demasiado ejercicio. También realizará una exploración física para ver si hay inflamación y si los hombros están alineados. Durante la exploración física el veterinario comparará el movimiento de las 2 patas delanteras. Se realizarán movimiento de estrés y se analizarán las diferencias.
Si el veterinario sospechara que el gato puede tener problemas con los ligamentos del hombro, solicitará unas pruebas de imagen para determinar el grado de la lesión.
Tratamiento
Normalmente el problema se resolverá en 1 o 2 semanas tan sólo limitando el ejercicio del gato. Si el gato mostrara infllamación o dolor, el veterinario podría recetar antiinflamatorios o calmantes.
Si la lesión del ligamento fuera grave el veterinario también podría decidir inmovilizar el hombro.
Si el gato no evolucionara y no mostrara signos de recuperación podría ser necesaria una intervención quirúrgica.