Miocarditis traumática en perros
Urgencia: Lo antes posible
Pronóstico: Bueno

La miocarditis traumática es el término que se le aplica a los latidos cardíacos irregulares (arritmias) a raíz de una lesión traumática contundente en el corazón. La prevalencia de arritmias graves después de un traumatismo es relativamente baja, pero algunas mascotas pueden desarrollar trastornos del ritmo clínicamente importante como taquiarritmias ventriculares es decir, patrones anormales de la actividad de los latidos cardiacos eléctricos que comienzan en los ventrículos. A menudo son relativamente lentos y se detectan solo durante pausas del ritmo normal. Se reconocen por una frecuencia cardíaca superior de los 100 latidos por minuto (LPM), pero inferior a los 160 LPM.

Síntomas

Signos de mala circulación de la sangre como debilidad o encías pálidas, ritmos cardíacos acelerados y posibles arritmias.  

Causas

Traumatismo como accidentes de tráfico, bajo nivel de oxígeno en la sangre, desequilibrio autonómico, desequilibrio de electrolitos y alteraciones acido- base son solo algunas de las causas que pueden desencadenar arritmias graves en el can.

Diagnóstico

Debe proporcionar un historial completo a su veterinario, indicando la aparición y naturaleza de los síntomas. A continuación, se realizará un examen físico acompañado de un perfil bioquímico, un hemograma completo (CSC), un análisis de orina y un panel de electrolitos. El análisis de sangre puede revelar concentraciones anormales altas de troponina, proteína que participa en la regulación de las contracciones del musculo cardiaco. 

Análisis especiales como gases en sangre arterial y oximetría de pulso determinarán si falta oxígeno en sangre (hipoxemia). Las imágenes de rayos X y los electrocardiogramas permitirán evaluar el tipo de lesiones presentes y los patrones de arritmias ventriculares anormales. 

Tratamiento

La terapia anti arrítmica solo se administrará si su perro presenta signos de arritmias. El veterinario administrará terapia de fluidos con electrolitos o analgésicos si fuera necesario. Si el perro presenta hipoxia, se le suministrará oxígeno. 

El pronóstico para una recuperación completa generalmente depende de la gravedad de la lesión extracardíaca. Las arritmias por traumatismo tienden a resolverse espontáneamente dentro de los 2-3 días posteriores al tratamiento. La terapia antiarrítmica puede interrumpirse después de 2 a 5 días.