Los síntomas pueden depender de la ubicación y el grado del tumor.
El tumor en la piel o debajo de la piel (subcutáneo), puede haber estado presente durante días o meses. Es usual que después de meses inactivo o sin crecimiento, empiece a crecer de tamaño. Normalmente conllevan enrojecimiento y acumulación de líquido bajo la piel.
El tumor puede parecer que fluctúa en tamaño. Extremadamente variable; puede imitar o asemejarse a otros tipos de tumores cutáneos o subcutáneos (benignos y cancerosos); puede asemejarse a una mordedura de insecto, verruga o reacción alérgica. Se muestra habitualmente como una sola masa cutánea o subcutánea, pero puede tener múltiples masas diseminadas por todo el cuerpo aunque el 50% se localizan en el tronco y el perineo (la zona entre el ano y la vulva en las mujeres, o el ano y el escroto en los hombres); el 40 por ciento se encuentran en las extremidades, y el 10 por ciento en la región de la cabeza y el cuello. Las masas pueden picar o inflamarse debido al alto nivel de histaminas en el tumor.
Los ganglios linfáticos pueden agrandarse alrededor del área del tumor y pueden desarrollarse cuando un tumor de alto grado se extiende a los ganglios linfáticos. El hígado y el bazo agrandados son característicos del cáncer de mastocitos de amplia difusión. Pueden producirse vómitos, pérdida de apetito y/o diarrea, dependiendo de la etapa de la enfermedad.
Los síntomas también dependen de la etapa de la enfermedad:
- La etapa 1 se caracteriza por un solo tumor sin metástasis
- La etapa 2 se caracteriza por un solo tumor con metástasis en los nódulos linfáticos circundantes
- La etapa 3 se caracteriza por múltiples tumores de piel, o por un gran tumor que ha invadido subcutáneamente
- La etapa 4 se caracteriza por la presencia de un tumor, con metástasis en un órgano o la presencia de mastocitos muy extendidos en la sangre.