Si la infección es leve la madre podría continuar amamantando pero lo normal es que el tratamiento afecte a la madre y a los cachorros ya que hasta que la madre no se recupere deberán dejar de amamantarse.
Para el tratamiento, el veterinario normalmente recetará antibióticos durante 2 o 3 semanas. También podría recetar antiinflamatorios si viera que la enfermedad es grave y quisiera calmar el dolor.
Si la mastitis se complicara hasta el punto de llegar a una sepsis, el veterinario entonces tratará al perro con terapia de fluidos intravenosos. Si hubiese abscesos o necrosis en las glándulas el veterinario probablemente proceda a la extirpación con cirugía.
Para calmar el dolor, el veterinario también puede recomendar colocar compresas tibias en la mamas y ordeñar la glándulas para mantener los conductos lácteos limpios.
Lo mejor es prevenir y tratar de evitar la enfermedad. Para ello, sólo es necesario acciones como limpiar las glándulas y cortar uñas de los cachorros para evitar heridas.