Tamaño de camada inferior al habitual. Es normal que la producción de esperma se reduzca al envejecer.
La infertilidad en machos es menos usual en hembras pero un perro también puede tener problemas de apareamiento o de fertilización.
Tamaño de camada inferior al habitual. Es normal que la producción de esperma se reduzca al envejecer.
Si el perro no quiere aparearse, normalmente hay detrás un problema hormonal. Sin embargo, si el problema es de fertilización, suele deberse a una baja calidad del esperma que puede estar causado múltiples factores:
El veterinario primero hablará con los propietarios para conocer el historial de apareamiento tanto del macho como de la hembra porque la infertilidad puede estar en cualquiera de los dos. Si en las últimas camadas del macho ha habido una disminución en el número de miembros de la camada, esto sería una señal de alarma.
Si el problema fuera que el perro no quiere aparearse, el veterinario realizará un análisis hormonal
Si no hubiera problemas de apareamiento, el veterinario tomará una muestra de semen para analizar la calidad del esperma. También examinará la próstata y los testículos en búsqueda de infecciones, anomalías físicas o posibles tumores.
El tratamiento dependerá del diagnóstico y las causas. En muchos casos el veterinario utilizará la gonadotropina que es una hormona que estimula la producción de testosterona. También es frecuente recurrir a la inseminación artificial cuando se determina que hay un problema de monta que es bastante usual.
Si el veterinario detectara alguna infección, entonces prescribirá los antibióticos oportunos. Y si detectara algún tumor deberá valorar si es operable o si hay que recurrir a tratamientos oncológicos.