Agitación constante y rascado de la cabeza, excesivo babeo, inflamación de la vejiga, fiebre, irritación de la piel y heridas abiertas en la piel.

Los síntomas de la candidiasis dependen en gran medida del lugar donde se produce la infección. Si es una infección de oído, un síntoma común es agitación constante y el rascado de la cabeza. Si es en la cavidad oral, generalmente existirá una cantidad anormal de babeo. Si se trata de la vejiga urinaria, el animal puede experimentar inflamación de la vejiga (cistitis). 

Los perros que sufran alguna condición que disminuya sus defensas, son más propensos a sufrir la candidiasis. La diabetes, las retenciones urinarias, las heridas en la piel o los catéteres permanentes suelen ser puertas de entrada para la candidiasis.

El veterinario realizará una exploración física en busca de lesiones en la boca, las orejas o los genitales del perro. Si encontrara tejido inflamados con pus, realizará una biopsia para ver si encuentra una concentración elevada de candidas.

También es habitual realizar análisis de orina para detectar la presencia de Cándida.

El veterinario recetará un tratamiento para fortalecer el sistema inmunitario del perro. Si el veterinario ha detectado una enfermedad subyacente, también tratará de corregir el trastorno para solucionar el problema.