Infección de las válvulas cardíacas (Endocarditis infecciosa) en gatos
Urgencia: Atención inmediata
Pronóstico: Malo

El revestimiento interno del corazón puede inflamarse como consecuencia de una infección en otras partes del cuerpo. Infecciones cutáneas o caries dentales no tratadas de manera adecuada porque son consideradas como problemas menores, podrían acabar afectando al corazón. Así, un problema leve podría complicarse dando lugar a una enfermedad muy grave. 

Es lo que se llama endocarditis infecciosa. La infección además de provocar inflamación del revestimento del corazón, también es frecuente que afecte a las válvulas del corazón y también provoque problemas en el normal funcionamiento del órgano.

La endocarditis infecciosa es más común en gatos entre los cuatro y los seis años. Asimismo, los machos tienen más posibilidades de padecerla que las hembras. 

Es necesario tratar la infección que ha provocado esta situación antes de que produzca una insuficiencia cardíaca de consecuencias fatales.

Síntomas

El paciente puede presentar un conjunto variable de síntomas dependiendo de la naturaleza y el lugar de la infección, las complicaciones y el alcance de los efectos en el corazón. Los siguientes síntomas pueden estar presentes en un gato afectado:

  • Debilidad o letargo
  • Tos 
  • Fiebre
  • La decoloración azulada de la piel
  • Letargo
  • Pérdida de apetito y de peso
  • Dolores corporales
  • Síntomas relacionados con problemas cardíacos
  • Dificultad para respirar
  • Cojera intermitente
  • Problemas gastrointestinales


Causas

Infecciones causadas por patógenos externos

Diagnóstico

En el momento de acudir al veterinario, lleve un informe muy completo y detallado del estado de salud del gato: si ha sufrido alguna enfermedad o cirugía y desde cuando está sufriendo los síntomas. 

El veterinario realizará pruebas de conteo sanguíneo completo, perfil bioquímico y análisis de orina. Así se descubrirá información que pueda revelar la infección subyacente y los órganos que están afectados. En este sentido es preferible extraer sangre arterial. 

Mediante hemocultivos se determina el agente que ha provocado la infección. Así, el veterinario podrá determinar los antibióticos más adecuados. Con rayos X se determinará la afectación cardíaca y la ecocardiografía, mediante ultrasonidos, obtendrá imágenes de los órganos afectados. Asimismo se medirá la actividad eléctrica del corazón mediante un electrocardiograma (ECG) que registra los movimientos e impulsos del corazón.

Tratamiento

La endocarditis infecciosa es un problema serio que suele requerir hospitalización. El tratamiento consistirá en terapia con líquidos y antibióticos para conseguir por un lado que los niveles de fluidos corporales sean correctos y por otro, que la infección quede controlada. 

Desgraciadamente, el pronóstico no es bueno, aunque depende de la etapa de la infección y de cómo funcione el corazón. Tras 12 semanas de tratamiento el veterinario volverá a tomar muestras para medir el progreso de la enfermedad y si la infección sigue presente. Una vez desaparecida, se suspenderá el tratamiento con antibióticos. 

Las posibilidades de recuperación son muy buenas si la infección es leve, se ha detectado a tiempo y el tratamiento es rápido y agresivo. El seguimiento detallado también ayuda a una buena recuperación. 

Las visitas al veterinario tienen que ser prácticamente semanales para planificar el seguimiento de la enfermedad, que incluirá dieta especializada para mejorar el funcionamiento del corazón y la salud de los órganos afectados. 

En el caso de que el diagnóstico fuera tardío, si la infección ha avanzado, las probabilidades de supervivencia son bajas. En tal caso, su veterinario le aconsejará sobre planes alternativos.