El gato puede presentar un conjunto variable de síntomas dependiendo de: la naturaleza y el lugar de la infección, las complicaciones y el alcance de los efectos en el corazón. Los siguientes síntomas pueden estar presentes en un gato afectado:
- Debilidad o letargo
- Tos
- Fiebre
- La decoloración azulada de la piel
- Letargo
- Pérdida de apetito y de peso
- Dolores corporales
- Síntomas relacionados con problemas cardíacos
- Dificultad para respirar
- Cojera intermitente
- Problemas gastrointestinales