Incontinencia fecal en perros
Urgencia: Puede esperar
Pronóstico: Bueno

La incontinencia fecal se define como la pérdida de control intestinal. La incontinencia fecal no suele ser una enfermedad en sí misma, normalmente es un síntoma.  Las enfermedades que lo causan son muy diversas. 

Síntomas

La mascota defeca en lugares inapropiados, las heces pueden ser normales o líquidas. 

Dependiendo de la enfermedad que padezca la mascota, puede ir acompañado de rigidez en las patas traseras, temblores, orina incontrolada, decaimiento, vómitos, abdomen hinchado o rascado del ano contra el suelo.


Causas

Pueden ser múltiples las causas. Puede estar causada por una enfermedad neuromuscular, neuronal, parásitos gastrointestinales, obstrucción rectal parcial, intoxicaciones, malformaciones de nacimiento, fistulas anales o tumores.

Diagnóstico

El veterinario observará el comportamiento y el estado de salud de su mascota. Un examen físico completo, neurológico, análisis sanguíneo y examinar las heces podrá ser necesario para llegar al correcto diagnóstico de la enfermedad que está causando la incontinencia fecal.

Es recomendable informar al veterinario de cualquier cambio que haya sufrido el animal, tanto de comportamiento, de alimentación, como de entorno. Informe a su veterinario de forma inmediata si su mascota ha sufrido un golpe o accidente traumático en los días anteriores. 

En caso de sospecha de enfermedad neurológica puede ser necesario un examen más exhaustivo, que incluya Rayos X y/o TAC. Si su veterinario sospecha de una obstrucción intestinal le recomendará una ecografía junto a un examen radiológico


Tratamiento

El tratamiento dependerá del diagnóstico definitivo. Las parásitos intestinales pueden resolverse con un antiparasitario. En cambio las enfermedades más graves podrían necesitar de tratamientos quirúrgicos, hospitalización o incluso quimioterapia.

Es importante diferenciar entre un problema conductual de una enfermedad grave, por ello si su mascota ha comenzado a defecar fuera de las áreas indicadas para ello, le recomendamos que visite a su veterinario.

En estos casos es importante tener paciencia porque el problema tiene solución pero requiere tiempo. Primero para detectar la causa correctamente y después para que el tratamiento surja efecto.