Los síntomas dependerán en gran medida de la cantidad y la naturaleza del contenido abdominal herniado. Algunos comunes incluyen:
- Vómitos
- Diarrea
- Tos
- Pérdida de peso
- Dificultad para respirar
El pericardio es el saco de doble pared que contiene el corazón. Por su parte, el peritoneo es la membrana que forma el revestimiento de la cavidad abdominal.
La hernia diafragmática peritoneopericárdica afecta a la comunicación entre ambos. Es un problema raro pero grave porque hace que el contenido abdominal pueda desplazarse hacia la cavidad pericárdica y compromete el buen funcionamiento del corazón y los pulmones.
Esta afección se considera un defecto prenatal pues suele desarrollarse en la etapa embrionaria.
Los síntomas dependerán en gran medida de la cantidad y la naturaleza del contenido abdominal herniado. Algunos comunes incluyen:
Normalmente hereditarias. En algunos casos también puede estar causado por accidentes o contusiones.
El veterinario preguntará por el historial médico y la aparición de los primeros síntomas. Después realizará una exploración física y probablemente los análisis estándar para determinar el estado general de salud del gato. Pero será con rayos X como se determine finalmente el tamaño y la parte herniada del abdomen, ya que los resultados de los análisis de perfil bioquímico, hemograma completo (CBD) y el análisis de orina suelen ser normales.
Existen pruebas más avanzadas como la peritoneografía de contraste. En esta prueba se utiliza líquido de contraste (químico) que se administra por inyección en la cavidad peritoneal y luego se realiza una radiografía en diferentes ángulos. Otra técnica comúnmente empleada para la confirmación del diagnóstico es la ecocardiografía.
Normalmente, el gato requerirá una cirugía para cerrar la hernia y colocar todos los órganos en su lugar habitual. Ahora bien, si esta anomalía se encuentra en gatos ya adultos que no presenten síntomas que afecten a su vida normal, no se requiere un tratamiento especial. El veterinario podría decidir establecer un tratamiento conservador y sólo realizar un seguimiento para evitar complicaciones.
El pronóstico es bueno si no hay complicaciones.