Las lombrices estomacales son causadas por el nematodo Physaloptera, gusanos que parasitan perros, gatos y otros animales. Las hembras adultas fijadas al tracto intestinal producen huevos que serán excretados por las heces. Posteriormente, los insectos coprófagos (se alimentan de heces) ingieren los huevos, las larvas se enquistan y permanecen infectivas hasta que son ingeridos por otros animales, liberando las larvas en el tracto intestinal donde completan su ciclo.
El nematodo también puede transmitirse por la ingestión de un roedor, lagarto o pájaro que sirve como intermediario entre el insecto y el huésped final.