Si el ritmo cardíaco es elevado, se suministrarán medicamentos para reducir el ritmo como el Diltiazem o beta-bloqueantes en algunos casos. También podría utilizarse la cardio versión para tratar de normalizar el ritmo cardíaco pero en gatos no es muy recomendable.
Si no se encuentra presente ninguna enfermedad subyacente, el tratamiento consistirá en normalizar los latidos y lograr que el nódulo sinoauricular vuelva a sincronizarse con el nódulo auriculoventricular.
En casos de una fibrilación crónica (más de cuatro meses), el pronóstico empeora y la recurrencia es común.
Es importante seguir las indicaciones del veterinario referentes a la dieta, ejercicio, descanso y manejo de la salud del gato en casa.