Epiescleritis en perros
Urgencia: Puede esperar
Pronóstico: Bueno

La epiescleritis es una afección médica que ocasiona el enrojecimiento de la epiesclera o parte blanca de ojo debido a la hinchazón. La inflamación aparece como un pequeño nódulo o engrosamiento de la esclerótica sin secreción relacionada o lagrimeo excesivo. 

Por lo general, la inflamación está contenida en un área específica, pero puede extenderse a otras áreas del ojo. En principio no reviste gravedad y el problema se puede solventar con relativa facilidad.

Síntomas

Se caracteriza por la aparición de una pequeña masa en el ojo. La masa o nódulo puede ser liso, indoloro, rosado o de color tostado. En algunos casos, la inflamación puede estar más extendida, causando que el ojo del perro se enrojezca e irrite. El perro puede sufrir dolor en los ojos, mostrar signos de incomodidad, frotarse los ojos con frecuencia, tener secreciones o incluso cerrar el ojo afectado.

Causas

Se cree que el desarrollo de la inflamación está relacionado con el sistema inmunológico. La hinchazón también puede ser provocada por infecciones bacterianas y/o fúngicas, linfomas, traumatismos oculares, ojos secos y glaucoma.

Diagnóstico

El veterinario realizará un examen ocular completo para descartar posibles causas de la inflamación. Si hay una masa grande ubicada en el ojo, el médico ordenará una biopsia para descartar un cáncer. Asimismo, podrá usar una prueba de tinción mediante el tinte de fluoresceína para evidenciar objetos extraños y ulceraciones en los ojos que estén causando la inflamación. Adicionalmente, tomará muestras para cultivos microbiológicos en caso de sospechar inflamación por infección bacteriana y/o fúngica.

Tratamiento

El tratamiento consiste en la aplicación de ungüentos tópicos y gotas para los ojos. La dosificación de los medicamentos dependerá de la gravedad de la inflamación. En la mayoría de los casos, el tratamiento puede administrarse de forma ambulatoria y se recomienda la observación durante las siguientes semanas para garantizar que no surjan complicaciones graves. Se puede sugerir el uso de un collar isabelino para evitar que su perro se rasque o se frote el ojo. 

La epiescleritis puede aparecer nuevamente, de manera que su mascota requiere que se vigile constantemente.