- Letargo
- Pérdida de apetito
- Pérdida de peso
- Cojera
- Resistencia a moverse
- Decaimiento
- Capa de pelo áspero
- Estreñimiento
Cuando la enfermedad va avanzando, el gato puede adoptar una postura sentada anormal con las extremidades delanteras levantadas. Y al andar puede ir con la cabeza bajada por culpa del crecimiento de las vértebras y con las patas delanteras flexionadas sin apoyar en el suelo.