- Diarrea del intestino delgado
- Falta de apetito
- Vómitos
- Pérdida de peso
- Diarrea del intestino grueso
- Esfuerzo por defecar
- Sangre en la diarrea
- Aumento de la cantidad de defecación
- Aumento de los sonidos intestinales
- Gases
Los antibióticos pueden ser la causa de algunos tipos de diarreas. Las diarreas aparecen principalmente cuando el antibiótico elimina las bacterias beneficiosas para el funcionamiento del sistema digestivo y cuando provoca irritación gástrica.
Cuando las bacterías benefciiosas para la digestión son dañadas por los antibióticos, otros tipos de bacterias oportunistas como el Clostridium perfringens o la Escherichia coli aprovechan para atacar y provocar problemas digestivos.
En ocasiones, algunos antibióticos provocan irritación en el sistema digestivo y diarreas en los gatos.
El veterinario realizará las pruebas básicas: perfil químico sanguíneo, hemograma completo, panel de electrolitos y análisis de orina. El veterinario realizará una exploración física y preguntará por el historial médico y por los medicamentos que haya tomado últimamente o todavía tome el gato.
El veterinario realizará un análisis fecal y un cultivo bacteriano para concretar por qué se está produciendo la diarrea.
En primer lugar el veterinario suspenderá el tratamiento y buscará antibióticos que puedan servir para tratar las dolencias sin contraindicaciones. Tan sólo con esto, y una dieta blanda, el gato rápidamente ya se recuperará. El veterinario establecerá una dieta baja en grasas y de fácil digestión para facilitar la recuperación. También puede ser necesaria la administración de suplementos de vitamina B12.
Normalmente el tratamiento será ambulatorio y no suele ser necesaria la hospitalización a menos que el gato sufra una gran pérdida de fluidos.