Blastomicosis en perros
Urgencia: Lo antes posible
Pronóstico: Bueno

La blastomicosis es una enfermedad causada por el hongo Blastomyces que se encuentra en zonas húmedas y con poca luz natural y mucha materia orgánica en descomposición.

Síntomas

Pérdida de apetito y de peso, descarga ocular, inflamación de los ojos (específicamente el iris), inflamación de los ganglios linfáticos, dificultad para respirar, fiebre, tos, ruidos respiratorios inusuales y lesiones cutáneas que con frecuencia se llenan de pus.

Causas

La condición suede adquirirse cuando el perro inhala el hongo Blastomyces dermatitidis. Una vez inhalado, el hongo se transforma en levaduras en el pulmón y forma piogranulomas. Desde el pulmón, mediante el sistema sanguíneo o linfático se puede diseminar hacia otros órganos del cuerpo.

En algunas ocasiones, la enfermedad se adquiere por contacto con el hongo a través de la piel.


Diagnóstico

Es una enfermedad difícil de diagnosticar porque puede confundirse con un cáncer o una infección pulmonar de origen bacteriano. Si se sospecha de esta condición por haber estado en una zona húmeda en las 6 semanas anteriores a la aparición de los síntomas es necesario comunicarlo al veterinario para que pueda realizar un correcto análisis.

Para un correcto diagnóstico el veterinario examinará los ganglios linfáticos, los tejidos pulmonares y la tráquea para buscar la presencia de organismos fúngicos. Para ello el veterinario recurrirá a citologías en aspirados o biopsias y pruebas de antígenos fúngicos en analíticas de sangre y de orina.


Tratamiento

El veterinario recetará un medicamento antimicótico para solucionar el problema. En los casos graves en los que el funcionamiento de los pulmones se viera comprometido, el veterinario podría requerir oxigenoterapia para poder respirar. Y si con el tratamiento pasa el tiempo y el perro no mejora, podría llegar a ser necesaria una intervención quirúrgica para extirpar la parte del pulmón afectada.

Normalmente el pronóstico es bastante bueno si el tratamiento se inicia pronto. Hay que vigilar que el perro no sufra recaídas y para ello conviene seguir con el tratamiento hasta asegurar unos resultados negativos en la prueba de antígenos.